Las carceleras son tonás de ambiente carcelario, a través de las cuales transmiten sus cuitas quienes sufrieron prisión.
Estilo flamenco considerado como una modalidad de martinete que pertenece al grupo de los denominados ‘cantes a palo seco’.
Como carceleras se rotulan muchas veces los martinetes-corridos, que bien pudieron tener su origen en el penal de El Puerto de Santa María; la única diferencia con un martinete es la temática de sus coplas y una cadencia propia de este cante que lo hace inconfundible. Se la escuchamos a Antonio Ranchal
Otro tipo de carceleras, cuya melodía apenas se interpreta sino como soporte musical de algunas saetas, parece más bien una seguiriya cabal, seguiriyas en modo mayor. Traemos a una jovencísima Rocío Dúrcal cantando una saeta sobre la melodía de la carcelera
EL COMPÁS
Como todas las tonás, las carceleras se cantan sin una métrica musical determinada, cante libre como se denomina en la nomenclatura flamenca
LA TONALIDAD
Se cantan en modo mayor
LAS LETRAS
Las estrofas sobre las que se canta la carcelera son, por lo general octosilábicas de cuatro o cinco versos de los que se repite, en las de cinco, el primero y el último y en la de cuatro versos se suelen repetir el primero, tercero y cuarto.